¿Por qué los regios amamos la carne asada?

 

🔥 ¿Por qué los regios amamos la carne asada?

En Monterrey y todo Nuevo León, la carne asada no es solo comida: es parte de nuestra identidad. Es el plan por excelencia cuando hay algo que celebrar… o incluso cuando no hay motivo más que el antojo y las ganas de convivir. Pero ¿qué tiene la carne asada que la hace tan especial para los regios?

El asador: el corazón de la reunión

Aquí no se necesita una ocasión especial para prender el carbón. Cualquier tarde puede volverse un asado improvisado con amigos, vecinos o familia. El asador se convierte en el punto de encuentro donde todos se arriman: unos a platicar, otros a ayudarle al parrillero, y otros más solo a esperar la primera tanda de tortillas con chicharrón de la carne.

Más que un platillo, una tradición

Para nosotros, hacer carne asada es casi un ritual. Desde elegir un buen corte (arrachera, rib eye, T-bone o hasta un buen cabrito), preparar las brasas con paciencia y cuidar cada vuelta de la carne para lograr ese punto jugoso y con sabor a humo que tanto nos gusta.

Un símbolo de unión

Lo que más disfrutamos no es solo el sabor, sino lo que sucede alrededor del asador: las pláticas largas, las risas, la música de fondo y el sonido del carbón chisporroteando. La carne asada nos recuerda que lo mejor de la vida son los momentos compartidos.

Los regios amamos la carne asada porque nos conecta con nuestra tierra y con nuestra gente. Es cultura, es orgullo y es amor por las cosas bien hechas.

Así que ya sabes: aquí en el norte, no importa el día ni la hora. Siempre hay un buen motivo para prender la lumbre y compartir un momento que sabe a hogar. 🔥